Nuevas noticias se esperan sobre el desarrollo del cuento del Txaman. Ahora, gracias a la presión espectacular del viejo Txaman de Praileaitz, algunos personajes ilustres se han dado cuenta de que mas vale aliarse a la valentía ciudadana que ir a contracorriente. Así el Sr. Alcalde de Deba, Jesusmari Agirrezabala ha sido iluminado con el espíritu del Txaman y en estos pasados días ha propuesto ceder nuevos terrenos comunales para que la explotación canteril del grupo Amenabar se mude hacia allí, a una distancia considerable de la caverna del Txaman (NdG, 19-05-2007), así no captará las malas vibraciones que tanto le perturban. De bien nacidos es ser agradecidos y, aunque la noticia llega algo tarde, puede que no sea solo una propuesta electoralista, como tantas otras habituales que nos tienen acostumbrados por estas fechas. El Sr. Alcalde es una persona seria y consecuente, se juega mucho su prestigio personal, así lo ha demostrado en los últimos tiempos sumándose al carro de la presión social del medioambiente (Agenda 21 Local, rasa mareal Deba-Zumaia, restauración de marismas Artzabal, etc), así que la propuesta no será solo un cambio de cromos para favorecer al siempre fuerte grupo Amenabar, sino que con los datos en la mesa sea una salida posibilista, que finalmente ha de ser adoptada con la legalidad vigente sobre la mesa, con luz y taquígrafos y aceptada por los tres Departamentos responsables, el de Medioambiente, Industria y Cultura del Gobierno Vasco. Aunque sus responsables políticos no lo tienen nada fácil. Hay que ser confiados y estar vigilantes hasta que finalmente el acuerdo sea el menos lesivo para el patrimonio cultural del entorno de la cueva de Praileaitz I y del nuevo lugar a donde se pretente llevar la agresiva cantera. Veremos lo que se opina desde los circulos críticos de las asociaciones de defensa medioambiental, siempre atentas a estas cuestiones tan controvertidas. Un cambio de cromos, para evitar el teórico coste de imdemnización a la cantera, podría ser aceptado siempre que ello no menoscabe otros intereses culturales o medioambientales de la nueva zona a explotar, aunque el menor coste y la mejor noticia sería que el grupo Amenabar anunciase» LA CESIÓN DE SUS DERECHOS DE EXPLOTACIÓN» al municipio de Deba y colaborase en un Proyecto como el propuesto por la asociación Praileaitzen Lagunak. Pero eso es mucho pedir y hay que tener la valentía y visión de futuro para aceptarlo y no creo yo que la empresa esté por esa labor, visto lo visto …. El suelo es un bien público escaso, las canteras son actividades fuertemente negativas para el impacto ambiental y su cesión debe estar bien calculada social y medioambientalmente justificada como necesaria, para que no vuelva a ocurrir como en este caso de la cantera de Sasiola, que se menospreció el valor patrimonial del yacimiento y se permitió la explotación minera sin restricciones, desmochando casi totalmente la colina y destruyendo el otro yacimiento hermano Praileaitz II con todas las «bendiciones legales», después de haber sido excavado. Se concedió unos derechos privados de explotación sin tener en cuenta sus negativas consecuencias y ahora se piensa en una huida hacia adelante, sin mas, como si nada hubiera ocurrido. De aquellas mediocres gestiones tenemos ahora estos importantes problemas. Veremos lo que nos deparan las noticias de los días venideros.